La bomba diamagnética representa la principal evolución instrumental en el campo de la fisioterapia. Se utiliza para realizar tratamientos de terapia diamagnética, utilizando la interacción selectiva, en los diferentes tejidos biológicos, de campos magnéticos hiperpulsados a alta intensidad (2 Teslas) y campos magnéticos de baja frecuencia (7 Hz) generados por la Bomba Diamagnética.
El diamagnetismo es una especie de magnetismo donde los materiales se oponen a la dirección de sus componentes moleculares contra campos magnéticos aplicados, recibiendo una fuerza repulsiva. El diamagnetismo es una propiedad, por su naturaleza, de los fluidos corporales, estructuras celulares y subestructuras y muchas moléculas farmacológicas. Esta propiedad permite efectos biológicos muy rápidos, efectivos y selectivos, que se traducen en tratamientos no invasivos ni dolorosos.
La terapia diamagnética, también llamada ADM (Acelerador Diamagnético Molecular) es:
- Una terapia no invasiva y completamente indolora.
- Una terapia adaptable a las complejidades en el desarrollo de la patología.
- Una técnica de intervención aplicable justo después del trauma o en las fases pre y/o postoperatoria.
- Una técnica que permite intervenir sobre la piel dañada (pie diabético, heridas postoperatorias) sin necesidad de contacto directo con la piel
- Una técnica que permite intervenir en caso de inmovilización prolongada (directamente sobre vendajes, yeso) sin necesidad de contacto directo con la piel
- Una técnica capaz de implantar fármacos sin usar agujas o corriente eléctrica con gran ventaja para el paciente en términos de comodidad e interoperabilidad de repetición.
El campo magnético generado por CTU Mega 20 interactúa directamente con los tejidos corporales, con beneficios inmediatamente visibles. Los mecanismos de acción generados para la Terapia Diamagnética son:
DESPLAZAMIENTO DE LÍQUIDOS: El agua y muchos compuestos orgánicos tienen propiedades diamagnéticas. La terapia diamagnética mediante la interacción con fluidos intracelulares y extracelulares permite estimular y normalizar las funciones esenciales del agua corporal.
BIOSTIMULACIÓN ENDÓGENA: La terapia diamagnética genera estimulación endógena porque la corriente eléctrica, generada por el campo magnético variable de CTU Mega 20 , se desarrolla directamente dentro de los tejidos, que se energizan mediante una intensa recarga de potencial eléctrico. Por lo tanto, la estimulación endógena puede ser utilizada sin generar dolor o sensibilidad en los tejidos dañados (úlceras, llagas, heridas). Además, la estimulación eléctrica es isotrópica, es decir, las propiedades son las mismas en todas las direcciones, tanto en superficie como bajo ella. Al variar las frecuencias y la morfología del pulso magnético, la Terapia Diamagnética permite una intervención selectiva en diferentes tejidos de interés terapéutico.
CONTROL DE DOLOR: El campo magnético tiene una acción analgésica y antiinflamatoria importante. Gracias a la Terapia Diamagnética es posible crear este efecto que va a actuar de forma selectiva sobre los receptores nerviosos del dolor, gracias al uso de frecuencias específicas de estimulación eléctrica.
IMPLANTE MOLECULAR: La Bomba Diamagnética CTU Mega 20 permite la administración e implantación de moléculas activas de medicamentos a través de una fuerza mecánica repulsiva, es decir, gracias a la aceleración dada por el campo magnético a las moléculas. Esto permite ir efectivamente más allá de la barrera cutánea, implantando la sustancia activa hasta una profundidad de 7 centímetros.
DIATERMIA: Asociado al campo magnético, en la bomba diamagnética CTU Mega 20 también se puede utilizar la radiofrecuencia. En particular en las patologías inflamatorias, la aplicación conjunta de la Terapia Diamagnética y la diatermia permite obtener el denominado "efecto push and pull".
Los principales campos de aplicación de la terapia diamagnética son:
- ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA
- MEDICINA DEPORTIVA
- FISIATRÍA
- TERAPIA DEL DOLOR
- DERMATOLOGÍA Y CIRUGÍA PLÁSTICA
- REUMATOLOGÍA
- MEDICINA ESTÉTICA